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viernes, 8 de marzo de 2019

Señor de la Vida

El pasado 3 de marzo se estrenó la marcha "Señor de la Vida", compuesta por Alejandro Sánchez para la Agrupación Musical Nuestra Señora del Mar y dedicada a esta Hermandad.

A continuación dejamos la propia marcha así como la inspiración creativa de su autor, que sin duda ayuda a escucharla con mayor atención y profundidad.


Texto del compositor Alejandro Sánchez:

La obra está construida de tal manera que refleja el pasaje bíblico representado en el momento de la Resurrección, concretamente en el boceto presentado por parte de la Hermandad de Jesucristo Resucitado, Señor de la Vida y María Santísima del Triunfo.

El comienzo…

El comienzo de la obra habría que situarlo en el Sábado Santo, ese día, que cubre la espera de lo que nos acontece, de la Resurrección de Cristo. La dulzura en la que se ve inmerso el inicio de la composición, viene marcado por la dulzura con la que María recuerda a su hijo, separándonos así del drama propio de la muerte de Jesús. Una actitud que desemboca en un fuerte, con el mismo carácter, pero más enérgico.

Segunda parte…

Una vez introducida la obra, damos paso a desarrollar la historia que transfiere de la nueva composición escultórica. Tal y como describe el evangelio de Mateo, “pasado el sábado, María Magdalena y María van al sepulcro donde de pronto se produce un gran terremoto provocado por la aparición de un ángel del Señor”; haciendo referencia a este transcurso encontramos el piano posterior al primer fuerte, donde la melodía va alternándose, referenciando a ambas, de camino al sepulcro; representando con crescendo y decrescendo de corcheas continuadas el terremoto. En el momento que decrecen las corcheas aparece una melodía representada por la cuerda de los bajos que haría referencia a la figura del ángel donde transmite a María Magdalena y María, lo siguiente “Vosotras no tengáis miedo, ya sé que buscáis a Jesús, el crucificado; no está aquí porque ha resucitado como había dicho, venid a ver el sitio donde estaba puesto” (Mateo 28:1-15), dando lugar a un fuerte que hace referencia a la ida hacia la cueva.

Final y desenlace…

El último tema de la obra, que hace referencia a la llegada de María y María Magdalena al sepulcro, transcurre paso a paso de manera ralentizada. Comienza con un solo de trompeta que corresponde a la incertidumbre de María por lo que les había comentado el ángel del Señor, una melodía dulce que desemboca en un piano calmado donde aparece un solo de corneta, todo ello haciendo referencia a la siguiente descripción “Un ángel del Señor descendió del cielo, se acercó, removió la piedra y se sentó sobre ella; su aspecto era como de un relámpago y su vestidura blanca como la nieve”, siendo el solo de corneta el descriptor de dicho destello.

Por último, y como desenlace, aparece la parte más alegre de la obra, el último fuerte. En dicha parte desarrollamos una melodía con una fuerza enérgica que significa el momento en el que María es consciente de dicha Resurrección, y donde comienza a tener razón de ser el término “Señor de la Vida”.